Recuerdo en los noventas cuando mi buen amigo Ricardo Arguello comenzó a hablar de Linux y GNU y todos lo escuchabamos sin mucho contexto y bastante incredulidad. O cuando la tesis de grado de mi amigo Luis Eduardo Cordova pretendía demostrar que se podía vivir por un periodo de 6 meses en un ambiente computacional de oficina puramente hecho de herramientas libres.
Hay mucha historia escrita al respecto en el Ecuador desde entonces. Uno de sus hitos más importantes se dió el 10 de abril del 2008, cuando el gobierno nacional emitió el Decreto 1014. Ese día sin duda se les hizo justicia a todos esos luchadores anónimos que siempre supieron caminar con humildad pero con convicción por esa senda. La Asociación de Software Libre del Ecuador ha sido cuna y caballo de batalla de muchos de ellos.
En este año tuve el gusto de conocer al director de investigación del proyecto FLOK Society, Michel Bawens, y al escucharlo me doy cuenta de que el software libre fue solo el inicio de algo muchisimo más grande y de alcances que todavía se siguen escribiendo hoy en día. Cuando ya no se habla solamente de “open source” sino que se lo transpone a “open knowledge”, comienzan a generarse conceptos tan interesantes como “infraestructuras abiertas” que de una u otra forma nacieron a raiz de los conceptos de software libre, cuyos primeros esfuerzos datan de 1984. Y eso es sólo un ejemplo, por no hablar de “open data” y otros acercamientos más ambiciosos.
Este preámbulo me sirve para explicar que hoy por hoy todo lo relacionado a lo “libre” no solamente dejó de ser una utopía, sino que pasó a transformarse más que en una realidad, en una tendencia del futuro, un futuro que huele a más y más a presente.
Para mi fue claro este mensaje en el 2012 cuando fuí llamado en Costa Rica a dirigir un proyecto para un cliente de Colorado, EEUU, que habia decidido reemplazar su costosa solución propietaria de telefonía por una basada en Asterix (abierta). El alcance del proyecto, una vez que comenzó a mostrar sus beneficios, fue expandido a todas sus divisiones en norteamérica y Europa. Y no estamos hablando de un cliente que lo hacía por falta de fondos, pues es una de las más grandes empresas de publicidad de los Estados Unidos. Su decisión era super consciente al ver que la industria estaba dirigiéndose por ese lado.
En tiempos más cercanos, ya como CIO en el Banco del Estado en Ecuador(BdE), nada más posesionándome del cargo me topé con la esperada “marea” de necesidades urgentes de toda índole. Por ejemplo, no solo había la necesidad de implementar alguna solución informática que centralice el manejo de la cartera de proyectos de tecnología, sino que en el tema de hardware, se habían expermentado downtimes importantes al no poder preveer e identificar ciertas brechas existentes. Para el primer problema, hice equipo con uno de mis mejores ingenieros y casi mano a mano instalamos PHProjekt, pues lo había usado años atrás con una empresa de telecomunicaciones en Centroamérica para organizar su portafolio deproyectos. Posteriormente migramos a DotProject pues nos daba mayores facilidades.
Para el segundo tema recordé a aquella empresa de Florida con la que trabaje en el 2013, la cual monitoreaba todos los activos computacionales de sus clientes usando NAGIOS (libre) y de cómo este software tan poderoso y sencillo era capaz de generar diferentes niveles de alertas en virtualmente cualquier elemento conectado en lared, de forma centralizada y agregada. Una vez implementado en el BdE, llegamos a tener monitoreo hasta el nivel de los puertos de los switches de toda la red del banco, indiferentemente de su marca o tecnología. Ante cualquier problema, si el mismo no era previsto por el mismo software, por lo menos podíamos identificar claramente donde estaba la brecha.
Es cierto: existen herramientas propietarias para lo que menciono arriba. Y algunas muy completas, pero a veces tan elaboradas y cerradas, que si tienes un ambiente diverso, tendrás que manejar varias herramientas para poder manejar cada marca de dispositivo que tengas. Visto así, pierdes en cierta forma la visión y la orquestación de todo tu aparataje tanto en aplicaciones como en infraestructura.
En el caso particular de una entidad de gobierno, estoy seguro que solamente estos dos proyectos puntuales (por mencionar unos pocos) le habrían costado al estado una buena cantidad de dinero usando software propietario y mas que nada tiempo, porque aun cuando los procesos de contratación pública ciertamente se han vuelto más ágiles, dificilmente por lo pronto tendrán la velocidad del ámbito privado.
Ahora, estos dos ejemplos sirven para retratar un día a día de temas interesantes, pero no necesariamente críticos. En el caso del las soluciones financieras (que serían las de misión crítica para un Banco como el BdE) , mientras no existan esfuerzos a alto nivel como los del gobierno de Brasil, que se dedicó desde hace ya algunos años a certificar ERPs libres/abiertos y otras soluciones para generar economías de escala entre sus entidades públicas, sería ingenuo talvez en pensar en una solucion libre de esa magnitud para el banco en este momento. Inclusive si se desea caminar en ese sentido, talvez sea más sabio emprender primero en otras áreas igual de importantes pero menos críticas, como el las soluciones BPM o las de manejo documental (las cuales comence a evaluar inmediatamente). Esto le daría también a la institución tiempo para entender, digerir y adoptar el paradigma“libre” en primera instancia, experimentar proyectos de su implementación y probar el soporte relacionado.
Soy una persona práctica, me oriento en los objetivos. Prefiero luchar con los pies en la tierra y dar batalla por partes y con una buena dosis de realidad, especialmente si mi objetivo final es de largo plazo, como en este caso sería el de promover el "paradigma libre" lo más posible. No creo que se trata de ser puristas. La carrera del software libre no es de velocidad, sino de resistencia. Debe ser tomada con inteligencia. Es un juego de quitarle poco a poco buenas mordidas al pastel empresarial que mide el porcentaje de soluciones libres versus las propietarias.
¿Hasta donde llegar? Esa es la pregunta. Y arriesgándome a ser deborado por los puristas “libres” y los que no entendieron que el activismo radical ya ganó esa pelea con el Decreto 1014 y que el reto ahora es manejar ese triunfo con inteligencia y sin dogmas ni extremismos, me arriesgo a decir que por lo pronto en TI no veo un mundo donde exista una supremacia de los paradigmas libres por sobre los propietarios, recalco, por lo pronto. El juego es un juego diferente: es quitarle espacio al competidor poco a poco mientras se convive con él, pero quitárselo firmemente y para siempre.
Parafraseando al gran Benedetti, mi estrategia es mas sencilla y mas simple, mi estrategia es que por fin un día, sin darnos cuenta ni de como ni de cuando, el software libre por fin sea necesario.
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