Ya desde la experiencia de viajar en un tren de Amtrak de dos pisos, muy comodo y rapido, se comenzaba a revelar un tema del cual me percate mucho mas cuando cambie del tren al metro en la preciosa estacion de Grand Central.
Me intrigraba la gente que viajaba bastante aislada en su mundo de iPods y mascotas, y podia ir hablando con sus perros y gatos, pero no con la persona que estaba sentada junto. Pensaba para mi mismo: en realidad en el Trolebus de Quito la gente tampoco es que habla mucho, pero por lo menos si habla no es con los animales. Intenta hablar con la gente.
Llegue al edificio de mi tio, un complejo de 30 pisos a 6 cuadras de Central Park. La misma historia se repetia en el trayecto de la parada del metro hacia su casa y luego inclusive en el ascensor.Yo por mi cuenta trate de hacer conversacion con quien pude, y logre entablar una con Raul, el guarda expatriado cubano de seguridad del edificio, quien muy amablemente me atendio y converso conmigo antes de mostrarme el camino al apartamento de mi tio.
Esos dias aproveche lo maximo que pude para visitar todos los museos que siempre quise volver a visitar y algunos otros que no habia conocido en Nueva York, gracias a la facilidad de estar tan cerca de todo y del metro, que se convirtio en mi medio de transporte por defecto. Llegue a entender muy bien el sistema. Pero en cada ocasion que visitaba el metro, o caminaba por la calle, estaba la gente con sus mascotas, dandoles toda clase de atencion, atuendos, lujos, mimos, etc.
Hace algunos años mantuve una relacion con una muchacha muy inteligente, super preparada, las mejores notas en su colegio (uno de los mejores) y tambien de las mejores estudiantes de su universidad. Eso le habia deparado una carrera exitosa y una posicion economica muy holgada. Aun asi, habia fracasado en su primer matrimonio, en el cual, como muchas otras cosas de su "lista de la vida", se metio por los motivos equivocados, por las tipicas presiones sociales.
En realidad tenia muchos handicaps emocionales y en contraste de toda esa vida profesional exitosa tan ordenada y orientada, su vida emocional era muy deficiente, pues era bastante caprichosa y obsecada, muy cerrada. Su divorcio termino por conformar en su cabeza la tipica mala conclusion de una relacion fallida: aislamiento emocional.
De esa forma, cada relacion que ella intento antes de estar conmigo, fallaba por sus deficientes skills humanos y emocionales y tambien por ese miedo a la intimidad, a abrirse y a querer nuevamente. Termino aferrandose a una mascota que al poco tiempo termino igual de neurotica que ella; una mascota que en su ausencia se autoinflingia heridas. Era algo terrible. Pero lo mas terrible fue que, una vez acostumbrada a ese tipo de relacion, lo que siguio fue buscar una pareja que pueda reemplazar al perro, pero que le de las mismas facilidades. Por suerte pude verlo a tiempo y termine aquella relacion tan egoista.
Como uno este relato con el anterior? Sencillo. Este mundo donde lo que vale es lo instantaneo y conveniente, donde para lograr objetivos se vale pisotear principios, personas e inclusive sueños, propios y de terceros, nos esta llevando a una deshumanizacion tal, que para muchas personas, las unicas relaciones estables y "sanas" que pueden mantener son con sus mascotas.
Las mascotas representan las relaciones perfectas en un mundo narcisista y apurado como en el que vivimos. Estan alli para suplir nuestras carencias emocionales y afectivas CUANDO NOSOTROS LAS TENGAMOS, y son tan nobles que cuando estamos saciados de esas carencias, simplemente las sacamos de la casa, las bajamos de la cama o las dejamos olvidadas. Y alli se quedaran hasta que nuevamente nuestro EGOISMO y VACIO nos requieran algo de cariño y afecto. En ese momento las sacaremos "de la jaula", las abrazaremos, les compraremos ropa y haremos un monton de cosas pensando que las hacemos por ellas... pero realmente un perro necesita un chaleco tejido de $40?? O realmente me lo estoy comprando a mi y a mi EGO para que mi mascota vea como la quiero y todos la vean bonita y "bien vestida"...
No quiero que se me malentienda. Yo creci junto y tuve mascotas en la casa de mis padres, que tenia un jardin grande y por lo cual podiamos hacerlo. Quiero mucho a los animales y cuando veo que se comete alguna injusticia contra ellos, o caen en alguna necesidad, buscare de alguna forma ayudar. En mi condicion de montañista me deleita la conexion con la naturaleza y los animales; siempre recordare a personajes como los colibries que me solian acompañar en las acampadas en el Cotopaxi, o mi perro pastor aleman de mi adolescencia. Inclusive a aquel perrito callejero que durante mi epoca universitaria de maestria llegaba a mi condominio por comida y refugio de tanto en tanto, que me regalo tanto inolvidables tardes de juego como pulgas dejo en el tapete de entrada.
Lo mio, el dia de hoy, es un llamado de atencion en un mundo donde andamos creando grupos en Facebook para recoger perros callejeros, mientras hay gente que vive invisibilizada y olvidada bajo un puente. Un mundo donde las mascotas duermen junto a sus amos en su cama, compartiendo hasta nuestro resuello al dormir, pero no somos capaces de entablar relaciones sanas con nuestros hermanos, padres y parejas.
Un mundo donde la comodidad se ha trasladado hasta a lo emocional. Algo no funciona? Se bota y se reemplaza. No puedo relacionarme con nadie? Pues me compro un perro y lo trato como humano solo porque nunca me va a reclamar nada nunca.
Amigos mios que tienen sus mascotas y ademas mantienen relacion sanas con sus seres queridos y a su alrededor: este blog no es para ustedes asi que de entrada les pido que no se ofendan ni se sientan aludidos. Este blog es para despertar algo en otro tipo de "poseedores" de mascotas que estan reemplazando relaciones humanas por no saber o poder mantenerlas, o hacer lo necesario para presioanrse un pocom crecer interiormente y lograrlo.
El concepto de construir una relacion duradera con otros seres humanos sobre la base de la humildad y la empatia, el respeto y la consideracion, el crecimiento personal y de la relacion, dando para recibir y aprendiendo e intercambiando... parece ya no hacer falta, parece no ser importante. Alguien "me toca los huevos" porque se mete con mi ego o me reclama algo en justicia? Se desecha y se busca reemplazo. Y si no hay mas personas, venga una mascota.
Lo que no podemos ver tal vez es que, en ese mundo que estamos creando, de relaciones desechables, donde andamos buscando personas "mascota" que sean convenientes a nuestras necesidades, agendas, ritmos y dinamicas propias, sin importar realmente la otra persona, tarde o temprano el egoismo estara tan extendido, que nos tocara jugar a nosotros ese papel de mascota y alguien nos metera en una jaula luego de jugar con nosotros.
No nos quejemos en ese momento del mundo que nos permitimos construir sobre la base de nuestra comodidad, egoismo y falta de coraje para luchar por verdaderas relaciones humanas que no solo representen conveniencia, sino crecimiento mutuo, respeto y consideracion.
